domingo, 27 de marzo de 2011

El Muro de Berlín

En rara ocasión
digo lo que siento.
Pero haré una excepción
en este momento.

Ya sé que mi voz
no es el mejor instrumento.
Aunque me sirve de motor
para lo que ahora cuento:

Detrás de cada frase perdida
de cada canción
se esconde un poco de vida
y mucha desilusión.
Sólo se decir Te quiero si lo escribo en un bloc.

Me quedo en el papel
para no estar perdido.
Querer y no poder
aquí no tiene sentido...

Detrás de cada plan suicida de huida
te encontrabas cada vez que la realidad nos mentía.
y nos marchábamos de aquí
para sentarnos en las ruinas
de lo que quedó en el Muro de Berlín.

viernes, 18 de marzo de 2011

Me muero y me ganas

Busco tantas excusas para verte
como lugares donde no encontrarte.
Al tiempo que este invierno me reparte
en luces sin sombra y penas de muerte.

Busco una huida a un cambio de suerte
y un recuerdo que logre envenenarme.
De algún modo, provocar el Desarme
de un deseo tan vivo como inerte.

Miento si en mi silencio no te digo:
En ocasiones me muero de ganas,
que en otras tantas me muero y me ganas.

Que por más que lo intento, no consigo
despreocuparme de nuestro olvido,
del brillo de sonreírte en un descuido.

viernes, 11 de marzo de 2011

Madrid llora

La mirada perdida
más allá de la ventana.
El traqueteo de una vía,
un invierno que se apaga.

Florece una sonrisa
al revivir un recuerdo:
un corazón de tiza
entre bostezo y bostezo.

Un golpe rotundo,
un grito ahogado.
El silencio más profundo
se sienta a tu lado.

Nadie sabe nada.
Está rugiendo el cielo.
La mañana calcinada
con tres agujeros.

Sirenas, ambulancias.
Aún no sabes lo que ocurre.
No se pueden parar las lágrimas
cuando la vida se te escurre.

Poco antes de las ocho,
acuchillando la aurora.
Hoy se ha parado todo.
Hoy Madrid llora.

La calle se viste de gente
por aquel maldito jueves.
No hay nada más intransigente
que tiznar el alma con muerte.

Poco antes de las ocho
¡Qué maldita hora!
En Santa Eugenia, en el Pozo
y en la estación de Atocha.

Sirenas, ambulancias,
Ya se sabe lo que ocurre,
son casi doscientas lágrimas.
Son las vidas que se escurren.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Tu patria y mi bandera

Es tu patria tu sonrisa
y tu risa mi bandera.
No hay ternura que no quiera
asomarse a la cornisa
de tu boca: tu vida entera.

Como una granada herida
yace de una pincelada
en horizontal trazada,
Siempre a tu gesto ceñida.

Deja entrever, si se estira
la risa. Su sencillez
combate la timidez
de un deseo que respira.

Pasajera de tus sueños,
de los momentos pequeños
que con su ayuda das vida:
Al diminuto momento
anterior a tu despedida.